Durante el partido de la Copa América 2024 entre Brasil y Colombia, una controversia surgió en el primer tiempo cuando el VAR anuló un gol de cabeza de Davinson Sánchez. La decisión se basó en la presunta posición adelantada de John Córdoba antes de que el balón llegara al arquero brasileño Alisson. Aunque las primeras imágenes del trazado de línea del VAR parecieron incorrectas, mostrando la posición de Córdoba en lugar de Sánchez, una revisión posterior desde otro ángulo confirmó que Córdoba estaba en fuera de juego, justificando así la anulación del gol. A pesar de que la decisión final fue acertada, la manera en que se realizó inicialmente causó críticas por no seguir los protocolos adecuados.
El partido continuó con más momentos polémicos, incluyendo una situación en el minuto 41 cuando Vinicius Jr. cayó en el área tras un enfrentamiento con Daniel Muñoz. Mientras el equipo brasileño reclamaba un penal, el árbitro Jesús Valenzuela decidió que era un tiro de esquina, una decisión que el VAR respaldó. Esta decisión también fue objeto de debate, con especulaciones sobre si Muñoz tocó el balón primero antes de interceptar a Vinicius. Estos incidentes mantuvieron el juego en un clima de constante revisión y cuestionamientos sobre las decisiones arbitrales.
Finalmente, el partido concluyó con un empate 1-1, con goles de Raphinha para Brasil y Daniel Muñoz para Colombia. A pesar de las polémicas, Colombia terminó como líder del Grupo D y enfrentará a Panamá en los cuartos de final, mientras que Brasil, como segundo del grupo, se medirá contra Uruguay, uno de los favoritos del torneo. Las decisiones del VAR y las controversias arbitrales fueron temas centrales que influenciaron significativamente el desarrollo del juego.
