La Fiscalía pidió cárcel para los cuatro policías bajo sospecha de manipular evidencia y testigos relacionados con el robo en la casa de Laura Sarabia, exjefa de Gabinete. Los oficiales investigados son Alfonso Quinchanegua, Dana Alejandra Canizales, Carlos Andrés Loaiza Correa y Jhon Fredi Morales Cárdenas. Según la Fiscalía, estos policías podrían haber alterado el informe de la Sijin sobre los eventos ocurridos el día del robo.
En la audiencia de medida de aseguramiento, la Fiscalía argumentó que existen discrepancias notables entre las declaraciones juramentadas de varios testigos y la información registrada en los formatos de fuentes no formales. Estas discrepancias, según la Fiscalía, sugieren la posibilidad de manipulación por parte de los policías.
Los cargos presentados contra los policías incluyen violación ilícita de comunicaciones, fraude procesal, falsedad en documento público y falsedad ideológica de documento público. La Fiscalía afirma contar con suficiente evidencia que respalda estas acusaciones, incluyendo pruebas de su participación en interceptaciones telefónicas ilegales.
La audiencia, que se llevó a cabo en privado por orden de la juez, se reanudará el próximo martes para que la Fiscalía continúe presentando sus argumentos para justificar la detención de los uniformados.
Es importante destacar que la fiscal mencionó durante la audiencia la posibilidad de un “pacto de silencio” entre los implicados, lo que podría estar obstaculizando la investigación en curso.
Además, durante audiencias preliminares, el representante civil de Marelbys Meza solicitó ser reconocido como víctima en el proceso, argumentando que su cliente entregó su teléfono celular durante una prueba de polígrafo y que, a partir de ese momento, tanto ella como su círculo cercano y su mejor amiga, Luz Elia Robles Arrieta, fueron objeto de interceptaciones telefónicas ilegales. La situación sigue desarrollándose y será objeto de seguimiento por parte de las autoridades judiciales.
