El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, respondió este lunes a la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de reincorporar a la isla en la lista de países patrocinadores del terrorismo. El mandatario cubano tildó este acto de “burla” y lo calificó como una muestra de “arrogancia” y “desprecio por la verdad”. En su mensaje, publicado en la red social X, Díaz-Canel denunció que la medida tomada por Trump tiene como objetivo reforzar la “cruel guerra económica” contra Cuba con fines de dominación.
Díaz-Canel resaltó que, a pesar de los esfuerzos por parte de la administración de su predecesor, Joe Biden, quien había retirado a Cuba de esa lista apenas seis días antes, el regreso de la isla a la misma demuestra el descrédito de los mecanismos unilaterales de presión impuestos por Estados Unidos. “El resultado de las medidas extremas de cerco económico impuestas por Trump ha sido provocar carencias en nuestro pueblo y un incremento significativo del flujo migratorio de Cuba hacia Estados Unidos”, afirmó el presidente cubano.
La decisión de Trump de reincorporar a Cuba a esta lista marca un giro importante en la política estadounidense hacia la isla. Esta medida fue tomada después de que Biden, en sus últimos días en el cargo, sacara a Cuba de la lista con el fin de facilitar la liberación de presos cubanos, como parte de un proceso de mediación impulsado por el Vaticano. Al mismo tiempo, Cuba liberó a 553 personas condenadas por diversos delitos, y Biden suspendió la capacidad de los ciudadanos estadounidenses para demandar en tribunales de su país la expropiación de propiedades en la isla.
La inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo, que se remonta a 1982, había sido retirada en 2015 durante el gobierno de Barack Obama, en un intento de acercamiento diplomático. Sin embargo, la administración Trump revirtió esa medida, imponiendo sanciones más severas. El regreso de Cuba al listado se basa, en parte, en las acusaciones de que la isla alberga a miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia, lo que según Washington justifica la designación.
Este regreso tiene implicaciones significativas para Cuba, incluida la prohibición de venta de armas, mayores restricciones a sus exportaciones y la imposición de sanciones económicas adicionales. A pesar de esto, Díaz-Canel reiteró que la “legítima y noble causa” del pueblo cubano prevalecerá ante estos actos de presión.