Quizás sea la primera vez que escuches de Bhopal; el nombre puede que no te diga mucho; hoy te quiero contar que hace 40 años en ese lugar ocurrió la que muchos consideran la mayor catástrofe industrial de la historia; más de 25 mil personas murieron, los heridos fueron innumerables y aun hoy 40 años después las nuevas generaciones siguen sufriendo las consecuencias del desastre ambiental originado en una planta de químicos.
Bhopal es una olvidada ciudad de la India donde se encontraba ubicada una planta de pesticidas de la empresa Unión Carbide en la que la noche del 2 de diciembre de 1984 se presentó la fuga de un gas toxico que en pocas horas provoco la muerte de miles de personas pertenecientes a las comunidades que estaban asentadas alrededor de la operación; además de los muertos; la nube toxica causo a los sobrevivientes lesiones severas y permanentes como ceguera, dificultades respiratorias, parálisis, trastornos neurológicos y alteraciones hormonales entre otras.
Bhopal no fue un accidente aislado; fue el resultado de decisiones humanas marcadas por la negligencia corporativa y la falta de regulación gubernamental; investigaciones del desastre ponen de presente que la planta operaba sin las medidas de seguridad adecuadas: sistemas de enfriamiento inoperantes, válvulas defectuosas y personal insuficientemente capacitado. Además, Union Carbide eligió Bhopal como sede por sus bajos costos, priorizando las ganancias sobre la seguridad de una comunidad vulnerable, Las víctimas de Bhopal eran, en su mayoría, familias de bajos recursos que vivían cerca de la planta; estas comunidades fueron las más afectadas y, paradójicamente, las menos compensadas.
En el año 1989 Unión Carbide y su matriz actual, Dow Chemical, pagaron una compensación económica que ascendió a $470 millones de dólares; este pago fue producto de un acuerdo extrajudicial con el estado Indio quien asumió la representación de las víctimas; el 93% de las victimas; esto es, alrededor de 500.000. personas recibieron 25.000 rupias, esto equivale a 327 euros a cambio de hoy.
El máximo responsable de la planta Warren Anderson en principio fue obligado a comparecer ante una Corte en la India, efectivamente llego al país, pero luego con el beneplácito de las autoridades tomo un avión y se fue a vivir a los Estados Unidos donde murió hace pocos años.
Los datos sobre Bhopal son aterradores; estudios científicos muestran que los niveles de mercurio llegan hasta 6 millones de veces por encima de lo esperado, el nivel de tricloroetileno un químico que afecta el desarrollo de los bebes en el vientre esta 50 veces por encima de los limites seguros, incluso estudios prueban que el código genético de los habitantes fue dañado, por eso hoy día 40 años después los bebes aun nacen con malformaciones.
La tragedia de Bhopal no debe ser solo una nota en los libros de historia, sino un recordatorio constante de la necesidad de poner a las personas por encima de las ganancias; los conceptos de desarrollo sostenible deben ser cada día un imperativo practico, menos demagogia y más eficacia es lo que se espera, La justicia ambiental no es un lujo ni un ideal abstracto; es una urgencia moral.