Luego de tres aumentos consecutivos en lo que va de 2025, los conductores que transitan por las carreteras de Córdoba recibirán otro golpe al bolsillo.
El Ministerio de Transporte ha anunciado un incremento adicional del 2% sobre la inflación anual para cinco peajes ubicados en este departamento, medida que se implementará desde 2026 hasta 2034.
Lo que resulta particularmente controversial es que este nuevo aumento servirá principalmente para compensar pérdidas generadas por la imposibilidad de recaudar en el peaje La Caimanera, ubicado en el departamento de Sucre, que ha generado un déficit superior a 153.000 millones de pesos.
Los peajes cordobeses afectados serán La Apartada, Manguitos, Mata de Caña, Los Cedros y San Carlos, todos parte del proyecto de Conexión Antioquia-Bolívar a cargo de la concesión Ruta al Mar.
Los usuarios de estas vías ya han enfrentado tres aumentos en 2025: un 2,7% el 1 de enero (que cubrió el 60% del IPC acumulado en 2023), otro incremento el 16 de enero correspondiente al IPC de 2024, y un 3,71% adicional el 1 de abril habrá otro para completar el ajuste pendiente del IPC de 2023.
La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) justifica la medida citando cuatro problemas financieros: la mencionada imposibilidad de recaudar en La Caimanera, las tarifas especiales otorgadas en varios peajes, la suspensión de incrementos por el Decreto 050 de 2023, y sobrecostos ambientales que superaron en 120% lo presupuestado.
Aunque estos problemas afectan al proyecto vial en su conjunto, que conecta Antioquia y Bolívar pasando por Córdoba y Sucre, la distribución de la carga financiera para resolverlos recae desproporcionadamente sobre los usuarios de las vías en Córdoba.
Los conductores de vehículos livianos experimentarán aumentos de entre 500 y 1.200 pesos anuales por peaje, mientras que para vehículos de carga pesada el incremento oscilará entre 3.000 y 6.200 pesos año.