Colombia vs Perú: El partido que pone a creer a todo un país

Opinión/ Por Luis Álvarez Jr.
8 años atrás

Opinión/ Por Luis Álvarez Jr.

Todavía es emocionante ver aquel primer gol marcado por Pablo Armero en el debut de la selección Colombia ante Grecia en 2014. Han pasado poco más de tres años, y, aunque contamos con la mayoría de los mismos jugadores, todos los colombianos tenemos la sensación de que no es el mismo equipo.

La realidad de hoy nos muestra una gran adversidad, Colombia, cedió en los partidos en los que no debía ceder, no mostramos contundencia en el ataque, ni claridad en el estilo de juego, es cierto. Pero, hoy seguimos aquí, con la fe intacta en que sí se puede. Menos de doce horas nos separan de saber si nos ilusionamos con la participación en Rusia 2018 o si nos resignamos a volver a repetir las historias de la primera década de los 2000.

¡Colombia no está sola! hemos reído juntos, hemos gritado, hemos saltado de emoción. Lloramos tanto o más que James en aquel partido ante Brasil. Aquellos estadios donde estos muchachos hicieron historia. Llegaron lejos, más lejos de lo que nosotros alcanzamos a imaginar, y, al final, nos quedó el sin sabor de que pudo seguir el sueño.

Más de cinco años siendo dirigidos por el argentino más querido por los colombianos, (a quien, sin importar como termine esta eliminatoria, le estaremos eternamente agradecidos por lo logrado). La prensa critica, los detractores siguen sus insultos y tienen total libertad de pensar que no clasificaremos. Pero, yo prefiero creer. Yo decido  confiar en esos  guerreros, aquellos mismos que empataron contra Chile 3-3 en Barranquilla, luego de haber finalizado el primer tiempo perdiendo 3-0.

Me rehúso (como diría Danny Ocean) a tener que pensar que Shakira, muy probablemente sea nuestra representación en el mundial. Me rehúso a tener que elegir a qué otra selección apoyar, que si Brasil (como la mayoría de las veces) o a algún otro equipo dirigido por algún técnico colombiano;  ¡No, nada de eso!

Mientras tengamos estos 90 minutos pendientes, seguiré creyendo. Seguiré soñando, como cuando tenía 4 años y descubrí mi amor por el fútbol. Como cuando veía los vídeos de el origen del “tiki taka” en Colombia. Hoy no haré más que sentarme frente al televisor, buscar una biblia, y ponerme a pedirle al cielo que nos permita volver a vivirlo. Hoy no quiero escuchar a los comentaristas, hoy no quiero saber de probabilidades, sin importar qué tan iluso suene. Yo seguiré creyendo, al final, yo fui uno de los que salió corriendo por toda la casa cuando vi como nuestro “10” marcaba el mejor gol del mundial frente a Uruguay, así que hoy no seré yo el que se vaya antes de acabar el partido.

No seré un aficionado de momentos, no seré un hincha solo de triunfos. A Colombia, la llevo siempre en el pecho, como cuando escuché su himno en los Olímpicos o cuando vi el nombre de Urán o Rigoberto en el podio y ni hablar de Falcao marcando golazos frente a varios equipos del continente europeo. Hoy, contra viento y contra marea, creo.