El gobierno chileno expresó su rechazo a las recientes declaraciones del presidente colombiano Gustavo Petro sobre el caso del alcalde chileno de Recoleta, Daniel Jadue. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile entregó una nota de protesta a la representación diplomática colombiana en Santiago, calificando las afirmaciones de Petro como inaceptables e imprudentes.
El conflicto se desató cuando el mandatario colombiano solicitó públicamente la liberación de Jadue, quien se encuentra en prisión preventiva desde principios de junio. Petro argumentó que la detención del alcalde comunista se basa en una “jurisprudencia pinochetista”, desconociendo el contexto legal y democrático actual de Chile.
“Yo pido la libertad de Jadue en Chile. Preso por la jurisprudencia de Pinochet impuesta a los seres libres”, expresó el mandatario.
La respuesta del gobierno chileno no se hizo esperar. El canciller Alberto van Klaveren manifestó que las declaraciones de Petro desconocen la trayectoria democrática de Chile y la existencia de un Estado de Derecho. Además, subrayó que estas afirmaciones interfieren indebidamente en asuntos internos del país sudamericano.
“Entregamos nota de protesta a encargada de Negocios de Colombia en Chile ante los dichos del Presidente Gustavo Petro. Se trata de declaraciones inaceptables e imprudentes, que desconocen la trayectoria democrática de nuestro país, así como la existencia de un Estado de Derecho”, dijo.
El caso Jadue, que involucra una investigación sobre presuntos delitos de corrupción relacionados con las farmacias populares, ha generado debate en Chile. Sin embargo, la intervención del presidente colombiano añadió una dimensión internacional al asunto, provocando tensiones diplomáticas entre ambas naciones.
La justicia chilena, por su parte, mantiene su posición respecto a Jadue. En una reciente audiencia de revisión de medidas cautelares, el tribunal decidió continuar con la prisión preventiva del alcalde, considerándolo un “peligro para la seguridad de la sociedad”.
