Los cultivos de cítricos y plátano en zonas rurales de Córdoba enfrentan graves afectaciones por la intensa temporada seca que azota al departamento desde finales de noviembre de 2024.
“Los cítricos ya empiezan a morirse. Uno pasa por el lado de algunas plantas y ya están muriendo”, señaló Ever Delgado, líder de la Junta de Acción Comunal de Villa Concepción, margen izquierda de Lorica.
Advirtió que las altas temperaturas están causando estragos en los cultivos más sensibles al clima.
Aunque cultivos como ñame y yuca han mostrado mayor resistencia a la sequía, por encontrarse en época de cosecha, los productores de plátano reportan considerable afectación en sus plantaciones debido a la falta de agua.
La situación es particularmente preocupante porque la temporada seca apenas comienza. Los agricultores temen que si no llueve antes de abril o mayo, mes cuando tradicionalmente retornan las precipitaciones, las pérdidas podrían ser catastróficas.
“Si el divino creador no nos manda unos aguaceros temprano, se visiona algo cruel”, aseguró Delgado, quien destacó que las plantas perecederas son las más vulnerables ante la actual ola de calor que afecta la región.