Feria Nacional de la Ganadería, identidad o goce

Por: Mario Sánchez Arteaga


Después de creado el departamento de Córdoba en 1952, se organizó ocho años después una festividad en la ciudad de Montería con la finalidad de conmemorar la separación del Bolívar Grande. Se necesitaba una fiesta que engalanara la conmemorativa fecha para que la sociedad se reflejara en ella y comenzara a crear su propia identidad cultural. Es entonces cuando en 1960 se realiza la primera Feria Nacional de la Ganadería, aglomerando a emprendedores de la industria ganadera de la región y el país. Año tras año se fue posicionando y adicionando una serie de eventos que la han consolidado como una mezcla de dos componentes primarios, el sector agropecuario y el sector cultural. Tanto así que Montería es considerada “La capital ganadera de Colombia”.

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A parte de las exposiciones y juzgamientos de bovinos y equinos, que fueron los que más sobresalieron en un principio, el sector fue ampliando más la participación y hoy se puede evidenciar masivamente muestras de animales de granja como conejos, gallinas, ovejas, cerdos, cabras etc. El Coliseo de Ferias Miguel Villamil Muñoz, epicentro de estas actividades que aglutina a miles de persones, se convirtió en una gran vitrina comercial para el empresariado regional, la música, la gastronomía, las artesanías, han enriquecido y enarbolado desde lo ancestral a lo más moderno esta festividad. Se fusionan el agro y la interculturalidad de un pueblo, reuniendo todos esos elementos materiales y espirituales que nos diferencian de otras culturas.

Hay dos eventos donde verdaderamente se vincula la sociedad en general, la parada folclórica y el desfile de carrozas. Las principales calles de la ciudad se convierten en un tapete de colores, danzas, gaitas y tambores, bandas de viento, cantos y palmas que preguntan desde las comparsas y los asistentes desde palcos o bordillos de los andenes corean con entusiasmo. Y por supuesto no pueden faltar las candidatas al Reinado Nacional de la Ganadería, participantes de diferentes regiones del país que se enlazan con el pueblo para llevarse un poco de nuestra calidez humana que no es solo por la incandescencia del infernal calor.

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Han pasado 62 años donde más que conmemorar la feria es una gran explosión de exposiciones de nuestra cultura local, del sector agroindustrial y del turismo. Ha contribuido la Feria de la Ganadería en la construcción de la identidad cultural de los monterianos? Yo creo que sí, es nuestra gran fiesta! Pero no debemos de dejar en ahondar la importancia de la tradición y el folclor en la memoria colectiva, que se pueda robustecer la identidad cultural desde los colegios y universidades para que los festivales o celebraciones de nuestros pueblos no se conviertan solo en el goce, en lo superficial, la diversión, convirtiéndonos en supuestos ciudadanos universales que conocen del mundo y no de lo verdaderamente nuestro.

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