Magdalena /Santa Marta. El transporte público y particular, al igual que la movilidad de turistas y samarios, colapsaron en el balneario de El Rodadero. La principal arteria vial de dicho lugar colapsó por la cantidad de vehículos que ingreso a la ciudad.
Sumado a ello, la ausencia de una adecuada señalización, agentes de tránsito, parqueaderos y pocas vías, hicieron de esta temporada el “lunar negro” de El Rodadero.
El más reciente reporte entregado por la Policía de Carreteras a la Unidad de Tránsito indicó que desde el primero al tres de enero han ingresado a la ciudad más de 40.000 vehículos.
Según Omar García Silva, presidente ejecutivo de Cotelco capítulo Magdalena “la opinión general de la hotelería legal de El Rodadero y de Santa Marta es que infortunadamente esta temporada ha sido desastrosa en cuanto a la movilidad y no se le puede echar culpa solamente al hecho que están llegando muchos vehículos”.
Para García Silva el problema real es que casi todos los vendedores informales tienen sus motos parqueadas en las calles de la ciudad, así como sus carros, bicicletas, trenes turísticos y chivas.
“También se toman los andenes de la calle 10 de este balneario, al parecer no hay interés por parte de la Unidad de Tránsito y hay una tristeza porque estamos viendo que realmente no sabemos para donde va El Rodadero porque habían comentando que se iba a estar muy pendiente y solamente estuvieron el día viernes pero hasta ahí no más, por eso hay un inconformismo general de toda la hotelería y de todos los prestadores de servicios turísticos formales”, recalcó el Presidente de Cotelco.
Los empresarios comprenden que hay muchos vehículos y que El Rodadero, por ejemplo no tiene muchas zonas de parqueo sin embargo consideran que la Unidad de Tránsito debe disponer de un plan de contingencia para estas temporadas.
Asimismo se reconoce que el turista debe ceñirse a la normatividad de tránsito que rige en la ciudad de Santa Marta y acatarlas porque precisamente tienden al orden de un destino turístico.
