En una sesión histórica, el Senado de la República fue convocado durante la Semana Santa para debatir la reforma pensional, contando con la participación de 80 parlamentarios, lo que permitió conformar el quórum necesario para avanzar en la sesión.
El presidente del Congreso, Iván Name, celebró la asistencia de los senadores, destacando el compromiso de trabajar en beneficio del país: “Hay 78 senadores presentes y dos que están llegando a la ciudad. Gracias senadores, la patria reconoce que somos los padres y madres de ella y así nos comportamos. Asistentes somos 80 senadores, es un récord”.
La senadora María José Pizarro, vicepresidenta de la corporación, afirmó que la estrategia de la oposición de dilatar la discusión no surtió efecto, enfatizando en la disposición al diálogo y la concertación para enriquecer el proyecto de reforma pensional.
Por su parte, el senador Miguel Uribe, de la oposición, expresó la necesidad de escuchar a todos los sectores impactados por la reforma, señalando que esta podría afectar el ahorro de millones de colombianos. Uribe denunció la falta de planificación en la sesión y rechazó la propuesta de reforma pensional del Gobierno, calificándola como una “gran estafa”.
La discusión sobre la reforma pensional continuará después de Semana Santa, con la votación de las ponencias, entre las cuales se encuentran dos negativas, una alternativa y otra positiva
