El municipio de Quinchía, en el Eje Cafetero de Colombia, ha sido por años una zona de extracción minera de oro, carbón y otros minerales. La actividad minera ha generado problemáticas de legalidad en la zona, donde los mineros artesanales han pedido que les sean entregados los títulos mineros de los predios en los que trabajan, los cuales se encuentran en manos de una multinacional.
En este contexto, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, propuso la realización de la Convención Nacional Minera como solución para los problemas de legalidad y la formalización de los pequeños mineros. Durante su visita al departamento de Risaralda, el presidente señaló que se deben organizar las comunidades mineras para llevar a cabo la convención y que de allí surja la reforma del Código Minero para el próximo semestre.
La propuesta de Petro tiene como objetivo principal reconocer y formalizar la actividad minera artesanal en Colombia. Según el presidente, al reconocerla con títulos de 10 o 30 años, tal como se hace con la gran minería, se podrá ayudar a que las tecnologías lleguen al pequeño minero y la depredación cese, cuidando así el territorio.
Los mineros artesanales en el departamento de Risaralda esperan que, de llevarse a cabo esta convención y la reforma del código, se les respeten sus peticiones de formalización y entrega de títulos mineros de las zonas en las que históricamente han realizado extracción. De esta forma, se les reconocería su labor como mineros artesanales y se les permitiría continuar trabajando de manera legal en la zona.
La propuesta del presidente ha sido vista con buenos ojos por los mineros de Quinchía y se espera que se lleve a cabo la convención y se reforme el Código Minero para el próximo semestre, lo que podría dar solución a las problemáticas de legalidad y formalización de la actividad minera en la zona.
