Montería. Para la empresa que opera el relleno sanitario Loma Grande, las afectaciones ambientales que se generan en la zona provendrían principalmente de la falta de mantenimiento a la laguna de oxidación del antiguo botadero El Purgatorio clausurado en el año 2007.
La directora de la compañía, Sandra Regino Chejne, aseguró que Servigenerales está pagando ‘los platos rotos’ por la falta de mantenimiento por parte de la administración municipal, al antiguo sitio de disposición final de residuos.
“A ese botadero no le hacen mantenimiento desde hace años luego de su clausura ya se evidencia en las pendientes las cotas de basuras y al pie de las lomas se nota el represamiento de aguas negras”, sostuvo Regino.
La funcionaria recalcó que este sitio debe ser intervenino, pues la empresa a la cual representa se está viendo perjudicada en su reputación por las afectaciones que genera el remanente de residuos allí depositado.
