¿Ha disminuido la población de iguanas en la Ronda del Sinú? CVS se pronuncia

La Corporación atendió los llamados ciudadanos relativos a una supuesta disminución de la población de iguanas en el parque lineal.


Montería. La Corporación Autónoma Regional de los Valle del Sinú y San Jorge CVS analiza la posibilidad de realizar un estudio para conocer si hay disminución de las especies de fauna nativa que habitan en el parque lineal Ronda del Sinú, entre ellas iguanas, monos aulladores, ardillas, palomas, aves, perezosos y demás.

En un primer acercamiento la corporación CVS a través de la dirección del Centro de Atención y Valoración de Fauna, realizó una visita de inspección al parque lineal para observar si hubo cambios en los comportamientos poblacionales de estas especies.

La visita fue motivada por varios llamados de atención de la ciudadanía, relativos a una supuesta disminución de la población de iguanas en esta zona, sin embargo, para establecer esto con certeza se deberá realizar un estudio minucioso.

Lea también  Donan 30 silos y 200 bloques multinutricionales a ganaderos por la temporada seca

Se requeriría de un estudio poblacional por transectos para conocer sí hubo disminución o aumento de algún tipo de especie, es un estudio que demanda tiempo y recursos y si la necesidad lo amerita la Corporación estaría presta a desarrollarlo”, explicó, Alberto Muñoz Rojas, coordinador del Centro de Atención y Valoración de Fauna de la corporación regional CVS.

La CVS no da crédito a las especulaciones que señalan a las comunidades indígenas (que estuvieron asentadas en el parque central) como responsables de la disminución de la población de iguanas a través de la caza.

“Ellos por su condición cultural y sabiduría ancestral son muy respetuosos de la naturaleza, saben qué animales pueden aprovechar para su consumo y cuáles no, además no hay ningún tipo de evidencia al respecto”, explicó.

Lea también  Unos 300.000 pesos podrían gastar los cordobeses en la elaboración de los platos típicos de la Semana Santa

En caso de ser necesario la Corporación realizará estudios faunísticos para saber si están siendo afectados por enfermedades, toda vez que algunos han cambiado sus hábitos por vivir en un relicto de bosque en medio de la ciudad.

A lo anterior se suman los trastornos alimenticios porque la oferta de alimentos que se consigue en la zona proviene principalmente de fuentes humanas, turistas y visitantes que arrojan comida no apta para el consumo de estas especies.