La muy segura designación del jefe de despacho Armando Benedetti como nuevo ministro del Interior generó reacciones encontradas este domingo entre parlamentarios y figuras políticas.
Fuentes cercanas a la Casa de Nariño confirmaron que solo resta el visto bueno final del presidente Gustavo Petro para oficializar el nombramiento, tras la salida de Juan Fernando Cristo.
El ministro encargado Gustavo García, quien se encuentra en Putumayo supervisando las elecciones regionales, señaló que continuará ejerciendo sus funciones hasta que el presidente tome una decisión definitiva. García indicó que cualquier cambio en el gabinete será anunciado directamente por el mandatario.
Desde el Congreso, el presidente de la Cámara de Representantes, Jaime Raúl Salamanca, adoptó una postura institucional y destacó la importancia de mantener una relación constructiva entre el Ejecutivo y el Legislativo. Sin embargo, varios congresistas expresaron su rechazo al posible nombramiento.
La representante Catherine Juvinao, del Partido Verde, criticó la decisión y señaló que demuestra que el gobierno “está dispuesto a lo que sea, como sea, al costo que sea”. Por su parte, Jennifer Pedraza, de Dignidad y Compromiso, calificó el movimiento como una “traición al mandato social de cambio”.
Desde la oposición, el representante José Jaime Uscátegui, del Centro Democrático, cuestionó la designación mencionando las acusaciones previas contra Benedetti. El excandidato presidencial Sergio Fajardo también manifestó su desacuerdo, argumentando que el nombramiento “profundiza la corrupción y destruye la confianza”.
La posible llegada de Benedetti al Ministerio del Interior ocurre mientras el gobierno busca impulsar su paquete de reformas en el Congreso. Durante su gestión como jefe de despacho, Benedetti ha mantenido diálogos con congresistas de diferentes bancadas, incluyendo los partidos Liberal, Conservador y de La U, además del Pacto Histórico.