El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, aseguró hoy que la política de doble rasero de Estados Unidos le impidió apreciar la amenaza real que representaba el Estado Islámico (EI).
Los países occidentales comenzaron a reaccionar solo después de que la televisión difundiera el repugnante video de la ejecución de los periodistas estadounidenses, afirmó el canciller en declaraciones a la cadena rusa Canal 5.
Tras calificar de inaceptable e inhumano ese crimen, Lavrov preguntó, ¿por qué los estadounidenses no se dieron cuenta antes de esa amenaza?, y respondió que la causa fue la política de doble rasero aplicada por Washington en la batalla antiterrorista.
Recordó que Estados Unidos y sus aliados desoyeron los llamados de Moscú a mancomunar esfuerzos y ayudar al gobierno sirio a crear junto a la oposición moderada y patriótica un único frente para combatir a los terroristas que invadieron el país árabe.
Lavrov subrayó que el EI, proclamado ahora enemigo numero uno de Washington, se hizo fuerte gracias a la financiación extranjera asignada durante el derrocamiento del gobierno libio y las tentativas de repetir ese libreto en Siria.
El canciller ruso se refirió a los reiterados llamados de atención de Moscú acerca de la presencia de muchos extremistas y terroristas entre quienes combatían a las autoridades oficiales de Libia y de Siria.
Nos aseguraron que ese asunto se solucionaría después de la caída de los regímenes, dijo al deplorar que los gobernantes occidentales no hicieron caso a Rusia.
Al referirse a la creación en estos momentos de una coalición antiterrorista, Lavrov expresó que “más vale tarde que nunca”, aunque insistió en la necesidad de obtener el consentimiento de las naciones en cuyo territorio se quiere luchar contra los terroristas, y en particular, la autorización de Siria.
Sobre la posición del Kremlin en este tema, el canciller recordó que Rusia suministra desde hace tiempo armamentos a Iraq, Siria y otros países de la zona para ayudarlos a reforzar su potencial en el combate a los terroristas.
Lavrov criticó en la entrevista que algunos políticos occidentales pretendan igualar lo que denominan “amenaza rusa” con los crímenes de los extremistas del EI.
Criticó un artículo con ese punto de vista publicado por el presidente estadounidense, Barack Obama, y el primer ministro británico, David Cameron, y concluyó que esa calumnia “está fuera de todo lugar, más allá del límite del bien y del mal”.