Aunque el Instituto había conceptuado anteriormente que las heridas de Fernando Merchán no eran tan graves como para causarle la muerte, el informe final los contradice y concluye que no se halló otra causa probable de muerte a parte de las heridas autos infligidas.
“No encontramos ningún elemento de juicio que nos indique que hubiese sido otra la causa”, expresó Carlos Valdez, director de Medicina Legal quien demás confirmó que el vigilante había consumido Trazodona, fármaco antidepresivo.
Para Medicina Legal, la hemorragia ocasionada por las heridas ocasionadas con una elemento filoso, fueron lo que a la postre le causó la muerte al vigilante del Equus 66, edificio de apartamentos donde hallaron el cuerpo de la pequeña Yuliana Samboní.
Otra explicación científica de Medicina Legal a la muerte de Merchán es que se trató de una hipoxia posicional, pues al estar depresivo entró en somnolencia adoptando una posición inadecuada para la respiración.
Finalmente el informe concluye que se descarta el homicidio y la participación de terceros en ese hecho.
