Este sábado 26 de abril se cumplieron las honras fúnebres y sepelio del patrullero de la Policía Nacional, Aldair Urango en el corregimiento Las Palmitas, donde residía su familia.
El uniformado fue asesinado el 24 de abril en el municipio de Ciénaga de Oro, Córdoba, por sujetos que le dispararon cuando se encontraba desarmado, de civil y de permiso visitando a sus familiares.
Durante la ceremonia se le rindieron los respectivos honores al joven policía, víctima de lo que las autoridades han denominado como “ataques cobardes” por parte del Clan del Golfo.
El patrullero Urango fue una de las primeras víctimas del “plan pistola” declarado por esta organización criminal contra la fuerza pública en Córdoba y otras zonas del país. Esta ofensiva ya deja tres miembros de la fuerza pública asesinados en este departamento.
El pasado 24 de abril, en la vereda de El Cerro, zona rural de Chimá, fue asesinado el soldado profesional José Francisco Espitia Martínez. Ese mismo miércoles atentaron contra la vida del subintendente de la Policía Yeiner Morelos Guzmán en el municipio de Lorica.
Este sábado 26 de abril el “plan pistola” cobró una nueva víctima en una emboscada en el municipio de La Apartada, donde fue asesinado el patrullero Cristian Juvenal Mora Parra.
Las honras fúnebres y sepelio del patrullero Aldair Urango se llevaron a cabo en su corregimiento natal, donde su familia recibió el cuerpo del uniformado caído en esta ola de violencia contra la fuerza pública en el departamento de Córdoba.