El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, nombró a Robert F. Kennedy Jr. como su secretario de Salud y Servicios Humanos, generando controversia debido a las posturas antivacunas y conspiratorias del designado.
Kennedy, hijo del exfiscal general Robert F. Kennedy y sobrino del expresidente John F. Kennedy, es conocido por su escepticismo hacia las vacunas y sus teorías sobre el covid-19.
Durante la campaña electoral, Kennedy se presentó inicialmente como candidato demócrata, pero luego abandonó el partido para postularse como independiente. Sin embargo, ante la falta de apoyo popular, decidió adherirse a la candidatura de Trump.
Trump anunció el nombramiento a través de redes sociales, destacando que la Secretaría de Sanidad desempeñará un papel crucial en la protección de la población frente a “productos químicos nocivos, contaminantes, pesticidas, productos farmacéuticos y aditivos alimentarios”.
Según el presidente electo, Kennedy se asegurará de que las agencias sanitarias cumplan con los mandatos científicos para hacer frente a la “epidemia de enfermedades crónicas”.
“Durante demasiado tiempo, los estadounidenses han sido aplastados por el complejo industrial de alimentos y las compañías farmacéuticas que han participado en el engaño, la desinformación y la información errónea cuando se trata de salud pública”, añadió Trump.