#Viral | En Quilmes, Argentina, una mujer de 39 años fue capturada por la Policía Federal por extorsionar a su “mejor amiga” y amenazarla con revelar algo que había hecho su víctima.
La capturada fue identificada bajo el nombre de Andrea Noemí Fernández y fue capturada como dirían en Colombia “con las manos en la masa” luego de que la policía recibiera una denuncia el pasado jueves 3 de marzo de la víctima de Andrea.
“Nos llegó su denuncia el jueves 3 de marzo y quedamos para que se presentara en la Fiscalía el viernes 4, por la mañana. Estaba con una crisis de nervios, no paraba de llorar. Mientras le tomábamos declaración, le empezaron a llegar más mensajes extorsivos”, esto explicó al Clarín de Argentina la fiscal Ximena Santoro.
La víctima de 41 años de edad estaba recibiendo hace seis meses mensajes de amenazas de forma anónima, en el que le afirmaban que si no entregaba el dinero que le pedían, su esposo se esteraría de la infidelidad que ella había protagonizado.
Según las investigaciones, Andrea logró quitarle alrededor de 200.000 pesos argentinos, es decir, un aproximado de siete millones de pesos colombianos como recompensa por no delatar a la víctima.
Aunque la víctima de este caso le había contado sobre su infidelidad a dos de sus mejores amigas, jamás se imaginó que una de ellas le jugaría en su contra y llegara tan lejos.
La extorsión empezó en el mes de agosto de 2021 por medio de mensajes de WhatsApp, claramente desde un número anónimo y al mismo tiempo por medio de otras redes sociales.
Posteriormente todo comenzó a ser más recurrente y la llegaron a amenazar incluso con violar a sus hijas.
“Con el tiempo, el tono de cada mensaje fue incrementándose. Llegaron a amenazarla con que junte más dinero si no iban a violar a sus hijas. Allí le cuenta a su madre que sacó un crédito por 80 mil pesos para pagar la nueva extorsión”.
Luego de iniciar las investigaciones, se percataron que se trataría de alguien cercano a la familia, ya que, tanto de la casa de la víctima, como la de su madre, se estaban perdiendo objetos de valor.
Finalmente, un fiscal ordenó que se realizara un operativo liderado por la Delegación Departamental de Investigaciones de Quilmes, en el que la víctima tendría que dejar 10.000 pesos argentinos marcados en un baño de mujeres en una estación de servicio de Quilmes y esperar a que el estafador los recogiera.
Increíblemente, la víctima se llevó la gran sorpresa de que el ‘estafador’ era una de sus ‘mejores amigas’.
En conclusión, la mujer fue detenida y capturada cuando recogió el dinero que hacía parte del operativo y ahora deberá enfrentar los cargos por extorsión agravada y retirada y hurto agravado.