El paro armado impuesto por el ELN en el departamento del Chocó ha causado la muerte de una mujer embarazada y su bebé en el municipio de El Litoral del San Juan, elevando a tres el número de víctimas mortales. El alcalde Jhon Jairo Gutiérrez informó que la tragedia ocurrió debido a la falta de combustible para trasladar a la mujer al puesto de salud más cercano cuando presentó complicaciones durante el parto.
Esta es la segunda muerte infantil reportada desde el inicio del paro. Anteriormente, una bebé indígena de 16 meses falleció en el municipio de Istmina al no poder recibir atención médica oportuna por las restricciones de movilidad. La menor presentaba síntomas de paludismo y desnutrición.
El paro armado ha dejado confinadas a más de 50,000 personas en la región. La Defensoría del Pueblo ha hecho un llamado urgente para que se respeten los derechos fundamentales de los habitantes en las zonas afectadas, que incluyen los municipios de Nóvita, Istmina, Medio San Juan, Sipí y Litoral del San Juan.
Las comunidades indígenas han sido particularmente afectadas. La Defensoría del Pueblo señaló que el paro impacta a varios resguardos indígenas en la zona, incluyendo Sanandocito en Sipí, y múltiples comunidades en Medio San Juan e Istmina. Además, los consejos comunitarios del San Juan-Acadesan y Mayor de Nóvita-Cocoman también se ven perjudicados por la situación.
La falta de acceso a servicios básicos de salud y la restricción de movimiento impuesta por el grupo armado están teniendo consecuencias fatales, especialmente para los más vulnerables como mujeres embarazadas y niños.