El proyecto del tercer puente de Montería experimenta una modificación significativa en su diseño, logrando minimizar el impacto en el barrio Betancí y La Coquera. Según informó el alcalde Hugo Kerguelén García, la nueva propuesta no requerirá la compra de casas en este sector.
Esta modificación representa un cambio sustancial respecto al plan original, que habría implicado la demolición de numerosas viviendas en La Coquera, en casi la mitad del barrio.
“El predio en donde se está pensando, en donde se tiene el diseño trazado, es un predio privado que, por supuesto, no toca a ninguna de las viviendas, el puente pasará a 15 metros de la vivienda más cercana”, explicó el alcalde durante una entrevista reciente.
El nuevo trazado no solo evita la necesidad de expropiar viviendas, sino que también contempla una altura considerable del puente, lo que, según Kerguelén, elimina cualquier posible afectación a las residencias cercanas.
La administración municipal zanjó la controversia en torno al proyecto, particularmente en sectores de la margen occidental donde desembocará el puente. Sin embargo, el alcalde enfatizó que estas preocupaciones “no están basadas en ningún criterio técnico”, dado que el nuevo diseño no afecta directamente a las viviendas.
Como próximo paso, la alcaldía planea realizar una socialización detallada del nuevo trazado con la comunidad. El objetivo es disipar cualquier duda y demostrar cómo el rediseño protege los intereses de los residentes mientras avanza con esta obra de infraestructura crucial para la ciudad.
