La Alcaldía de Montería ha tomado la decisión de exigirle al contratista del proyecto Businú, demoler y reconstruir la placa en tierra de la estación Rancho Grande del sistema de transporte fluvial, a pesar de que la estructura es técnicamente funcional, no tuvo acabados óptimos.
El alcalde Hugo Kerguelén García explicó las razones detrás de esta decisión: “Cuando nosotros llegamos vimos que el contratista había realizado unos trabajos en la estación en tierra, pero que estéticamente no se veían muy bien. Estructuralmente, estaban bien, hicimos todos los ensayos de laboratorios requeridos, pero estéticamente no se veían bien”.
La Alcaldía explicó que el contratista asumirá todos los costos que implique fundir nuevamente la placa.
“Una obra como un Businú no debe verse de la manera como estaba. Por eso exigimos al contratista: me demuele toda esa placa que usted hizo ahí y me la hace nueva para que el acabado de la estación quede como Montería lo merece”, relató Kerguelén.
Actualmente, la demolición de la placa original está en proceso. El plan es realizar una nueva fundición que cumpla con estándares estéticos más altos. “Están hoy demoliendo toda esa estación en tierra, para luego fundirla mejor, más bonita con una formaleta decente”, añadió el alcalde.
El alcalde enfatizó que esta reconstrucción no supondrá costos adicionales para el municipio, ya que forma parte de las responsabilidades del contratista en entregar un trabajo que cumpla con todos los estándares requeridos, incluyendo los estéticos.