El bocachico, especie emblemática y de gran valor económico, cultural y alimenticio en la cuenca del río Sinú, se encuentra en riesgo debido a la degradación de su hábitat en importantes humedales de la región, según revela un estudio publicado por la Universidad de Córdoba.
La investigación, titulada “Índice de idoneidad de hábitat del bocachico (Prochilodus magdalenae; Steindachner 1879) en la ciénaga Grande del Bajo Sinú y ciénaga de Betancí, Córdoba, mediante la implementación de un modelo hidrodinámico y de calidad del agua”, fue realizada por los ingenieros ambientales José Fernando Lorduy González y Karol Edith Vellojín Muñoz, y publicada en marzo de 2023.
El estudio aplicó un novedoso modelo para evaluar las condiciones de hábitat del bocachico en estos ecosistemas cenagosos. Los resultados evidencian cómo actividades antrópicas en las áreas aledañas están afectando negativamente la calidad del agua, con impactos en parámetros clave para la especie como el oxígeno disuelto y el nitrógeno amoniacal, especialmente en época de lluvias, por aportes contaminantes de la agricultura y ganadería circundantes.
Además, los investigadores encontraron que alteraciones en la hidrodinámica natural de las ciénagas, como la desconexión de la ciénaga de Betancí con el río Sinú o la construcción de diques y jarillones en la ciénaga Grande del Bajo Sinú, están modificando la velocidad y profundidad del agua, variables importantes para el hábitat idóneo del bocachico.
Estos hallazgos son preocupantes, pues el bocachico ya había sido catalogado como especie vulnerable desde el 2012.
Esfuerzos para su conservación
La realidad mostrada en el anterior estudio ya ha sido analizada anteriormente y los esfuerzos para la conservación del bocachico se han materializado, un grupo de científicos colombianos, paraguayos y chinos reportó tras cuatro años de investigación que tiene el genoma de este pez endémico de Colombia, el más consumido a nivel nacional, con el fin de buscar su preservación. La investigación fue publicada por la revista Frontiers in Genetics y financiada por Isagen, en convenio con la Piscícola San Silvestre.
Según los investigadores, con el genoma se podrá conocer la manera como la especie se podrá nutrir y reproducir mejor, así como buscar las posibilidades de que obtenga mejores resultados en resistencia a enfermedades y cambios climáticos. También se tuvo en cuenta el proceso migratorio de la especie, pues en los cuerpos de agua por los que suele transitar se han encontrado cargas hormonales que bloquean la del pez, deteniendo su migración y afectando su reproducción.
En ese mismo sentido, una asociación entre el grupo de investigación en peces nativos, GIPEN, Universidades del Magdalena Medio, centros de desarrollo tecnológico y laboratorios nacionales e internacionales fue conformada en 2018 para desarrollar estrategias para la conservación y uso sostenible de los recursos pesqueros nativos de Colombia.
El bocachico habita principalmente el río Magdalena, pero también puede ser encontrado en los ríos Cauca, Sinú y Atrato. Es de suma importancia para la alimentación de las comunidades ribereñas; se calcula que al menos 1.500.000 personas lo consumen y unos 150.000 pescadores viven de su comercialización.
