Un operativo conjunto del CTI y el Ejército Nacional destapó una red de comercio ilegal de uniformes y accesorios militares en Bogotá. La acción, que se desarrolló simultáneamente en los barrios San Rafael y La Candelaria, resultó en la intervención de ocho establecimientos dedicados a la venta de estos artículos falsificados.
Los investigadores descubrieron un verdadero arsenal de imitaciones: desde uniformes completos hasta accesorios como gafas, guantes y gorras, todos diseñados para simular el equipo oficial de las fuerzas armadas colombianas. Entre los hallazgos más alarmantes se encontraron insignias falsas de la Armada, el Ejército y la Policía Nacional.
Fueron más de dos toneladas de material textil incautado, incluyendo 1.250 prendas similares a las utilizadas por militares y 268 pantalones tácticos camuflados. Asimismo, se decomisaron 522 pares de guantes tácticos y 165 sombreros pixelados tipo desierto, evidenciando la sofisticación de esta red de falsificación.
Pero el descubrimiento no se limitó a prendas de vestir. Las autoridades también encontraron elementos potencialmente peligrosos: 250 cartuchos para armas traumáticas, casi 300 cartuchos de seguridad de diversos calibres y más de mil armas cortopunzantes. La presencia de estos artículos sugiere conexiones con actividades delictivas más allá de la simple falsificación.
Un fiscal especializado en propiedad intelectual obtuvo la aprobación judicial para las incautaciones, marcando el inicio de una investigación por usurpación de derechos de propiedad industrial y uso ilegal de uniformes e insignias oficiales.
Las autoridades continúan investigando para desmantelar completamente esta red y prevenir futuros casos de falsificación y comercio ilegal de uniformes militares.