133 cardenales iniciaron este miércoles 7 de mayo el proceso de elección del sucesor del Papa Francisco en la Capilla Sixtina del Vaticano. Los prelados proceden de 70 países diferentes y necesitarán 89 votos, una mayoría de dos tercios, para elegir al pontífice que guiará a los 1.400 millones de católicos en el mundo.
La jornada comenzó a las 10:00 a.m. con una misa en la basílica de San Pedro presidida por el decano del colegio cardenalicio, Giovanni Battista Re, quien a sus 91 años supera el límite de edad permitido para participar como elector.
Los cardenales partirán a las 15:45 horas desde la casa de huéspedes Santa Marta hacia la Capilla Paulina del Palacio Apostólico, donde realizarán una oración a las 16:30 horas antes de dirigirse a la Capilla Sixtina para comenzar las votaciones.
El próximo líder de la institución de 2.000 años de antigüedad enfrentará desafíos significativos: equilibrios diplomáticos en tiempos de incertidumbre geopolítica, divisiones internas entre tradiciones progresistas y conservadoras, las secuelas del escándalo de abusos sexuales del clero y la disminución de feligreses en Occidente.
El Vaticano calificó el cónclave como “uno de los eventos más secretos y misteriosos del mundo”. Los cardenales electores permanecerán aislados en la casa de huéspedes Santa Marta y en Santa Marta Vecchia durante todo el proceso. Las deliberaciones continuarán hasta que la fumata blanca anuncie la elección del nuevo pontífice.
Este cónclave representa el más grande celebrado en la historia de la Iglesia Católica. Mientras Francisco y Benedicto XVI fueron elegidos en dos días, el proceso podría extenderse considerablemente. El récord histórico lo mantiene la elección papal más larga, que duró 1.006 días entre 1268 y 1271.
El 267º papa de la Iglesia será presentado al mundo desde el balcón de la Basílica de San Pedro, probablemente varios días después del inicio de las votaciones.