Los campesinos del corregimiento de Rovira, en San Pedro, Sucre, enfrentan dificultades para comercializar sus cultivos de yuca, uno de los principales productos agrícola de la zona, debido a los bajos precios que se ofertan en el mercado.
Según Oreste Martínez, líder campesino de la Asociación de Familias Campesinas Rovira Siembra, actualmente un bulto de yuca se está comprando a 7,000 pesos, lo que ha llevado a muchos agricultores a utilizar el tubérculo para alimentar al ganado ante la imposibilidad de venderlo a precios justos.
“Mire hasta donde ha llegado la problemática económica de los campesinos, al no tener pasto en estos momentos les están picando la yuca al ganado, para no perderla porque está muy barata”, señaló Martínez.
Esta situación se ha visto agravada por el auge de los cultivos de yuca industrial en la región durante los últimos dos años, los cuales, según el campesino, han ido desplazando progresivamente las siembras tradicionales de pancoger.
Martínez explicó que el arriendo anual de una hectárea de tierra, que antes costaba entre 500,000 y 600,000 pesos, se ha incrementado hasta 1 millón de pesos debido a la demanda de los grandes cultivadores de yuca industrial.
“El campesino ya no pudo competir con estas propuestas de arriendo, así que no sembró. Muchas familias se quedaron sin sembrar el pan coger porque los cultivadores del monocultivo de yuca industrial acapararon toda la disponibilidad de áreas de siembra en el corregimiento“, afirmó el líder campesino.
También indicó que los campesinos que le apostaron a la yuca industrial este año, debido a la alta demanda que registraba, no han podido comercializarla en su totalidad ante la crisis que atraviesa el sector, por lo que esperan que con los acuerdos pactados entre los representantes del gremio yuquero y el Gobierno Nacional, mejore la situación para los cultivadores de su municipio.