10 años de prisión para conductor y pastor, por la muerte de 33 niños en Fundación

       El juzgado primero penal de Ciénaga (Magdalena), condenó a 10 años y 9 meses de prisión a Jaime Gutiérrez conductor del bus donde murieron incinerados 33 niños del municipio de Fundación Magdalena, y a 10 años y 4 meses de cárcel al líder espiritual Manuel Salvador Ibarra, quien organizó el traslado de los menores hacia la iglesia Pentecostal Unida de Colombia a dónde participarían de unas actividades religiosas, el domingo 18 de mayo de 2014. Manuel Salvador (Líder Iglesia) y...


El juzgado primero penal de Ciénaga (Magdalena), condenó a 10 años y 9 meses de prisión a Jaime Gutiérrez conductor del bus donde murieron incinerados 33 niños del municipio de Fundación Magdalena, y a 10 años y 4 meses de cárcel al líder espiritual Manuel Salvador Ibarra, quien organizó el traslado de los menores hacia la iglesia Pentecostal Unida de Colombia a dónde participarían de unas actividades religiosas, el domingo 18 de mayo de 2014.

Manuel Salvador (Líder Iglesia) y Jaime Gutiérrez (conductor del bus).
Manuel Salvador (Líder Iglesia) y Jaime Gutiérrez (conductor del bus).

El juez indicó que los acusados no podrían recibir ningún beneficio, dado que las víctimas eran menores de edad. Fueron condenados por el delito de homicidio simple en calidad de dolo eventual en concurso homogéneo. Cabe recordar, que el pastor también perdió a su hija en el lamentable suceso.

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Además de esta sentencia, se inició la investigación a los familiares de los menores, y a los representantes de la iglesia evangélica, por su presunta responsabilidad en los trágicos hechos. Los familiares expresaron su indignación por esta medida.

La Fiscalía determinó que el vehículo había sido sancionado por no cumplir los requerimientos exigidos por las autoridades, además de que presentaba sobrecupo, lo que impidió que los niños pudieran salir del bus a tiempo; la conflagración se originó por una falla mecánica, cuando al parecer el conductor llenó de forma “artesanal”, el tanque del combustible, y las llamas se esparcieron inmediatamente, produciendo graves quemaduras en los menores, que no pudieron ser rescatados con vida.

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