A nuestro saber, la caña flecha es una especie de planta originaria de América que pertenece al grupo (herbácea o hierba) caracterizada por sus delgados tallos, largas hojas y de manera particular por su hábitat de cultivo, terrenos bajos e inundables; lo que la dota de privilegios útiles, es esta la razón por la cual los indígenas Zenú , desde las generaciones primitivas hasta hoy , la consideran como una materia prima de gran utilidad , al tiempo que la han convertido no solo en el símbolo que los identifica como grupo , sino como una marca identitaria de tipo cultural que referencia al territorio colombiano .
Como si se tratara de la repetición de un rito ancestral , que data de más de 2000 años , la tejeduría de la caña flecha , sigue viva entre los dedos de los artesanos , quienes aprovechan este material natural , para convertirlo en una fuente de producción económica ,de manera autodidacta , se expresan a una sola voz , representada en muestras como el sombrero vueltiao, bolsos , carteras , pulseras , abanicos , entre otras ,la creatividad y la filosofía de los indígenas zenú , que despiertan atracción de propios y extranjeros .
En hora buena, se debate en el Senado de la República, un proyecto de ley que busca convertir esta mágica labor de tejeduría de caña flecha, en patrimonio cultural inmaterial de la nación, indudablemente, es un tributo merecido a esta tradición milenaria, que con el paso del tiempo ha logrado traspasar fronteras, posicionándose como una obra de arte digna de admiración y que tiene sus orígenes en el municipio de Chinú, departamento de Córdoba.
Esperemos que esta iniciativa tenga un buen curso y que la tejeduría de la caña flecha, siga siendo además de un oficio artesanal, la memoria viva de los ancestros indígenas, la identidad cultural de un país, con una carga de sentido social, a fin de salvaguardar y proteger este tesoro que constituye parte de la riqueza patrimonial de la nación.