Evaluar el mercado laboral

Por: Marcos Velásquez


Opinión. Cada inicio de año laboral trae sus propias expectativas. Lo maravilloso de dicha sensación, es que permite evaluar la realidad en el mercado laboral en que cada quien está inscrito.

Quien trabaja ha de tomar decisiones sobre las metas que no cumplió, revisar con cabeza fría los desaciertos que se le presentaron, al igual que la lógica de los atinos en los objetivos trazados, con tal de valorar cuál será su dinámica en este nuevo escenario, dado que ningún año es igual a otro.

Algunas personas piensan que, por estar trabajando al interior de una empresa, no tienen por qué preocuparse por la construcción de una Marca Personal, estimando que ser empleado los exime de dicha tarea. Sin embargo, la realidad competitiva del mercado impone que todo aquel que hace parte del mundo laboral, es responsable de velar por su Marca Personal.

Es tan indiscutible este hecho, que los empíricos como los profesionales hoy día tienen que dar cuenta de una serie de demandas impuestas por el mercado laboral, con tal de sostener su vigencia dentro de él.

En otras palabras, lo que salva a un trabajador de no quedar por fuera del mercado laboral, ya sea que trabaje para una empresa o como autónomo, es lo que él evidencie en la construcción de su relación de datos históricos y personales que tienen que ver con su actividad laboral, cuando está frente a una empresa que demanda sus servicios o cuando entra a negociar con un cliente por primera vez.

A lo sumo, los puntos claves que se han de tener presente en la evaluación de resultados obtenidos, avances o en la revisión del histórico que se ha construido a lo largo del cumplimiento de unas funciones o de hacer existir una misión como trabajador inscrito en un mercado laboral específico, son:

  1. COMPETENCIAS TÉCNICAS

Estas apuntan a lo que la persona domina. En otras palabras, qué sabe hacer, en qué es fuerte y qué ha creado a partir de lo que dice que sabe hacer.

Este punto permite borrar del imaginario afectivo la inmadurez de todo aquel que trabaja para que le reconozcan lo que hace. Las empresas, como los clientes, no contratan a una persona para resaltar su saber hacer. Por el contrario, gracias a ello es que se pacta un contrato con la persona.

En este orden de ideas, las competencias técnicas apuntan a que usted dé a conocer su dominio en el área laboral para la cual se postula, principio que le permitirá en una entrevista de trabajo o con un primer cliente, resaltar por qué usted es la mejor opción para desarrollar las funciones o llevar a cabo la tarea que se le pide.

Dentro de estas competencias, puede resaltar algo que está dentro de lo subjetivo y que no lo enseñan ni en las escuelas ni en las universidades, a saber: la resistencia a la frustración, el trabajo bajo presión, el trabajo en ambientes tóxicos (hablando de clima organizacional), el liderazgo de equipos de trabajo, las habilidades para conciliar y quizá la más importante de todas, si se está dirigiendo a una empresa o a un cliente que desea innovar para no naufragar en el turbulento e inestable mercado de bienes o servicios de hoy día, la creatividad. Claro está que, si realmente cuenta con estas habilidades, si no, es mejor pasar por alto este apartado.

Tenga presente que, todo lo que usted consigne en este punto, es porque lo hace y lo sabe hacer, por ello, no espere reconocimientos de parte de quien lo contrate, sino exigencias para que usted pueda capitalizar en su currículo más experiencia.

  1. MANEJO DE HERRAMIENTAS

El Siglo 21 se consolida como el Siglo de la tecnología, por ello, usted ha de evaluar qué tanto dominio tiene de las herramientas ofimáticas que le permiten optimizar, automatizar, mejorar tareas y procedimientos relacionados en su área laboral.

Hoy se habla del dominio de paquetes ofimáticos, no del manejo de una herramienta en particular. Por ejemplo, es inaudito en el mundo del mercado laboral que un profesional diga que maneja Word y no Excel. Hoy por hoy se ha de trabajar de modo indiscriminado con todas las herramientas que ofrece un paquete informático, dado que el mundo laboral de hoy exige que quien trabaja, tenga una característica: que sea multitarea.

Cabe anotar que cada oficio o profesión tiene sus propias herramientas informáticas, sus softwares especializados que permiten agilizar, precisar y mejorar la información, como su entrega, por ello, quien trabaja, es el responsable de dominar dichas herramientas para estar a la altura de las circunstancias.

De igual modo, y que no es negociable dentro de un mercado laboral globalizado, quien trabaja, ha de saber que está supeditado al cumplimiento de la culminación de tareas en tiempo real. Ello quiere decir que, no es para cuando la persona estime que puede acabar la tarea asignada, sino para cuando el cliente o la empresa necesita cumplir con una entrega específica.

Por ello, trabajar bajo presión se ha tornado en una cualidad muy importante para las empresas o los clientes, dado que las negociaciones que están en juego al interior de ellas, hoy y cada vez más mañana, son globales, lo que impone que toda tarea se ha de entregar en el huso horario del país donde fue concebida.

  1. FORMACION ACADÉMICA

Se ha de tener presente que, la Universidad o el Tecnológico, a lo sumo, proporcionan las bases para que quien desea ingresar a un mercado laboral, tenga conocimientos mínimos de lo que allí va a hacer.

Por ello, los empíricos son personas con más habilidades a la hora de entrar a demostrar qué saben hacer, dado que ellos en su momento solo aprendieron a hacer lo que hacen de manera específica.

Su debilidad radica en la falta de reflexión humanista y ética en la que pueden caer. Al no contar con esta formación en su proceso de aprendizaje, pueden obrar de manera egoísta frente a las repercusiones de su hacer. Sin embargo, se ha de resaltar que, incluso quienes han contado con ella, no la tienen presente en el momento de obrar, esto tristemente comprobado en muchos casos expuestos por los medios de comunicación.

De este modo, el mundo laboral de nuestros tiempos impone capacitación continua, lo que hoy se denomina educación continua.

Parta de la base de que todo software es actualizado cada año, cuando no, cada dos años, lo que implica que quien trabaja con softwares especializados es responsable de actualizarse junto a su evolución y desarrollo.

Así, si una persona quiere hacer parte del mundo laboral y no desea verse amenazada por las exigencias de su competencia, le corresponde actualizarse de modo continuo, con tal de sentirse a la altura de las circunstancias, para conservar el flujo de trabajo que demanda el mundo laboral de hoy día.

  1. ACTIVIDADES EN REDES SOCIALES

En el mercado laboral y en la construcción o consolidación de una Marca Personal, no se ha de bajar la guardia en lo que tiene que ver con las Redes Sociales. Si bien estas están diseñadas para socializar, no se han de entender como la forma más primaria de su origen.

Al inicio de estas, ellas se presentaron para que entre amigos se compartiera información personal íntima, pero cuando estas se desarrollaron, dicho principio básico perdió el norte al dejar a la deriva de cualquier persona la posibilidad de ver y leer la información íntima que se compartía con seres humanos cercanos.

Muchas personas desestiman este real, por ello, las Redes Sociales dentro del Mercado Laboral, han de ser utilizadas para dar a conocer las fortalezas, los logros y los avances o innovaciones que cada persona tiene en su cotidianidad laboral.

Utilizar las Redes Sociales para socializar, para compartir información laboral apropiada, es lo oportuno.

Por ello, de las Redes Sociales se puede pasar a la construcción de foros especializados en los que muchas personas del mundo pueden aportarse dentro de un trabajo colaborativo para que el saber hacer de cada quien se potencialice y permita construir valor a la empresa o a los clientes que utilizan sus servicios.

  1. TIPS PARA FRACASAR:
  2. Destáquese como un mediocre: No siga estos pasos que le permiten construir o consolidar una Marca Personal, al igual que lo ayudan, no solo a estar inscrito en el mercado laboral, sino que le proporcionan una dosis de amor propio al aferrarse al obelisco de su quehacer.
  3. Demuestre su mezquindad: Al no tener competencias fuertes que le permitan destacar su saber hacer, al no contar con el dominio o manejo de herramientas técnicas o informáticas, al no tener habilidades sociales, dedíquese a crear comentarios de corrillos, intrigas entre compañeros para ocultar su falta de habilidades laborales que exige el Siglo 21.
  4. Grite que es un incapaz: Anule todo lo que sus compañeros de trabajo hacen descalificando de modo socarrón su hacer. Piense solo en usted y en sus beneficios personales sin importar las consecuencias para los demás.  Trabaje por su salario y olvídese de construir una Marca Personal que le permita, independiente de su edad, tener un reconocimiento y un respeto por usted como un ser humano que le aporta siempre valor al mercado laboral con su hacer.

Vocabulario clave:

Marca Personal

Mercado Laboral

Clima Organizacional

Entregas de trabajo en tiempo real

Educación Continua

Flujo de Trabajo

Redes Sociales