El legado zenú

Por: Rodrigo Acevedo Marsiglia


Opinión. Dice la leyenda de la antigua cultura zenú, que en el principio del mundo todo era oscuro y frio, las tierras eran húmedas y en el firmamento no brillaban las estrellas, tampoco había seres vivos ni ningún atractivo y que solo imperaba el silencio. Para ese entonces los únicos seres que habitaban estas tierras eran los dioses Mexión y Manexca la más bella de las mujeres con un solo seno, juntos fueron los creadores de los humanos y todo cuanto existía en la tierra de los zenúes.

A nuestro saber, los Sinú o zenú, son un pueblo de aborígenes colombianos cuyo territorio ancestral esta acentuado en los valles del río Sinú y san Jorge y el litoral Caribe que rodea el golfo de morisquillo. El nueve de agosto se celebra el día universal de los pueblos indígenas, fecha conmemorativa declarada por las naciones unidas desde 1982, con el fin de reconocer la importancia de estos pobladores en la historia de la humanidad y que mejor fecha que esta para resaltar la importancia de nuestros indígenas zenú. Este grupo ancestral que subyace la memoria de los cordobeses como un referente cultural, que por generaciones hemos tenido presente.

Hablar de Sinú, de zenú , o simplemente de indio sinúano ; es hablar de los valores culturales y sociales relacionados con el Sinú colombiano, es evocar los referentes históricos tejidos, con el mestizaje cultural y racial de nuestros antepasados precolombinos que datan de los años (1500) y que permanecen hasta hoy, expuestos a transformaciones que arriesgan la conservación de algunas características identitaria y representativas de este patrimonio cultural, los cambios más notables los podemos evidenciar en características relevantes tales como : la perdida de la lengua, hoy el pueblo indígena zenú es monolingüe, habla el castellano ; de igual forma la influencia de las nuevas tendencias sociales afecta la música zenú , que también ha sufrido transformaciones , ya no se imita los sonidos del medio ambiente, de los animales y fenómenos naturales , actualmente se producen otros ritmos influenciados.

De la misma manera y quizá una de las transformaciones en las características zenú que causa más impacto es la relacionada con la forma de vestir, anteriormente la forma de vestir del pueblo zenú era muy particular, los hombres vestían con parumas y sombrero vueltiao para protegerse del sol, hoy usan pantalones y camisas, las mujeres usaban faldas creadas por yardas de tela y babuchas, hoy usan faldas cocidas en telas de colores y blusas con escote. Pese a estas trasformaciones, que sin lugar a dudas apuntan al deterioro del patrimonio cultural zenú, resulta pertinente resaltar un grupo de características que mantienen vivo el legado ancestral, fortaleciendo un sistema de creencias y una forma de vida, dotándonos de la dicha de ser únicos, además de representar un referente que hace eco de arcaica cultura en el territorio colombiano.

Dentro de este legado vivo tenemos; la medicina tradicional zenú, fundamentado en las plantas yerbabuena, orégano, yerbasanta, toronjil, ajonjolí, entre otras para preparar los brebajes curativos y curar los males del cuerpo a este poder curativo atribuido a las plantas se le suman los rezos y los conjuros, que además ahuyentan los malos espíritus , el consumo de alimentos , la alimentación del pueblo zenú se basa en el maíz , el plátano , el ñame , la ahuyama , la yuca , la batata , además de las carnes de res , cerdo, gallina y pescado , las creencias ancestrales y religiosas , basadas en los mitos , las fábulas, los cuentos y las leyendas reconfortan el referente de la existencias de seres como( duendes , mohanes y encantos).

Las artesanías, este es sin lugar a duda uno de los legados que sobre sale en nuestra sociedad constituyendo un aspecto relevante en la sociedad colombiana, representado en el sombrero vueltiao , los canastos y los accesorios elaborados por nuestros representantes de la etnia zenú a base de caña flecha , bejucos , iraca , enea y junco , palabritas misteriosas, los aborígenes zenú , también han contribuido a la construcción de nuestro lenguaje popular repetimos constantemente un sin número de palabras, decimos por ejemplo: sinuano día, sinuano noche , Metro Sinú , Manexca , Momil , Chinú , Chimá , la Ronda del Sinú, entre muchísimas otras palabras que le dan vida al lenguaje ancestral.

Sumado a las características en mención, hay muchas más que fortalecen la identidad sinúano y que constituyen un tipo de hombre apegado a la tierra y con una cosmovisión entre lo mítico y lo real, lamentablemente la sinuanidad auténtica ha sido débil para resistir los comportamientos de una sociedad influenciada por diversas culturas, es poco lo que queda de las típicas y recias características de los antiguos sinuanos, por ello y casi que a manera de responsabilidad, conservemos esta nostálgica memoria, disfrutando de la heredad que nos han legado y fortaleciendo su salvaguardia; disfrutemos de las creencias, de la gastronomía , de los mitos, de las leyendas y del inmenso valle del Sinú ,todo esto es nuestro y es único y si es nuestro y es único, es una dicha ser sinuano .