Cambio climático, acuerdo de París y megaproyectos

Por: Javier De La Hoz Rivero


El aeropuerto internacional de Londres conocido como el Heathrow es el aeropuerto con mayor actividad en Europa; llegando a movilizar más de 213 mil pasajeros en 1299 vuelos diarios, para que esta operación funcione se necesitan 76.500. empleados, expongo estas cifras para que se hagan una idea de la magnitud de esa obra.

En el mes de Julio del 2018 el gobierno británico aprobó la ampliación del aeropuerto la que incluía la construcción de una nueva pista y una inversión de 16.500. Millones de Euros, para lograrlo se debían demoler poco más de 800 edificios, la meta fijada era que el aeropuerto movilizara 756 mil vuelos al año, es absolutamente indiscutible la importancia de ese proyecto.

Diariamente muchos opinan sobre el cambio climático y se suelen asociar esas opiniones al aumento de las lluvias, deshielo en el ártico y otro sinnúmero de fenómenos climáticos. ¿Pero qué tiene que ver el cambio climático con la operación de un aeropuerto? Tiene todo que ver, y no solo esa obra o proyecto, sino con todas las que se presentan desarrollar.

En el año 2015 en el marco de la conferencia sobre cambio climático conocida como la COP 21 las partes alcanzaron un histórico acuerdo, este se conoce como el acuerdo de París, entre otros se plantearon como objetivo reforzar la respuesta de los países al cambio climático a través de acciones y objetivos concretos, tales como, limitar el aumento de la temperatura mundial muy por debajo de los 2 grados centígrados, sin dejar de lado los esfuerzos para limitarlos a 1.5 grados centígrados.

Así mismo las partes se obligaron a preparar, comunicar y mantener una contribución determinada y aplicar medidas para lograrlas, en consecuencia, el acuerdo de París se puede decir es el instrumento internacional más importante para combatir el cambio climático.

Esta semana un Tribunal en Londres literalmente “tumbó” la ampliación del aeropuerto Heathrow de esa ciudad argumentando que la obra no respetó lo acordado en París, el gobierno británico no tuvo en cuenta al momento de formular el proyecto los compromisos que se hizo en la COP 21, la justicia lanzó un mensaje claro y contundente, los acuerdos sobre cambio climático deben ser tomados en serio. El gobierno no apelará según anunció.

Es claro que se le está diciendo a los gobernantes que esos acuerdos tienen aplicación concreta y práctica.

Colombia ratificó el acuerdo, este hace parte del bloque de constitucionalidad por ende aplicable en nuestro país.

Esta decisión judicial es un fuerte llamado de atención a los gobiernos, empresarios e inversionistas de grandes proyectos, al momento de planificar y formular los mismos se deben tener muy en cuenta los compromisos y metas consignadas en el acuerdo de París, no hacerlo es poner de presente que no se están salvaguardando las próximas generaciones, pero además el riesgo a que la obra o proyecto sea paralizada es exponencialmente alto.

Posdata: Mientras las Cortes en Londres toman decisiones de impacto global, La Corte Suprema de Justicia en Colombia “interpreta” su reglamento interno para elegir los reemplazos.