La segunda vicepresidenta de la Cámara de Representantes, Lina María Garrido Martín, emitió una contundente carta, rechazando la convocatoria a sesiones extraordinarias ordenada por el presidente Gustavo Petro, previa a su viaje a Oriente Medio.
En el documento dirigido al presidente de la Cámara, Jaime Raúl Salamanca, Garrido cuestiona la pertinencia de realizar sesiones sin la presencia del mandatario en el país, calificándolo como un “derroche de recursos públicos” y un “atropello a la democracia”.
La congresista del departamento de Arauca argumenta que la convocatoria carece de dirección efectiva, considerando la reciente crisis ministerial y la ausencia de liderazgo gubernamental. Hace referencia al consejo de ministros del 4 de febrero, donde se evidenció lo que ella denomina “la implosión de un gobierno incapaz”.
La representante exhorta a sus colegas legisladores a no legitimar lo que considera una “burla” institucional, enfatizando que Colombia necesita instituciones que trabajen con seriedad. Su postura refleja una creciente tensión entre el Legislativo y el Ejecutivo.