El Senador Miguel Uribe criticó duramente la política de seguridad del Gobierno de Gustavo Petro tras un nuevo atentado del ELN contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas en Norte de Santander.
“En el año llevamos más de cinco atentados contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas. Estamos volviendo a lo peor del pasado, a la violencia de la que queríamos escapar”, declaró Uribe.
Las Fuerzas Militares confirmaron que este ataque, el segundo en menos de 24 horas, involucró la detonación de explosivos en uno de los tramos del oleoducto.
Uribe atribuyó estos hechos a la supuesta flexibilidad del Gobierno con las estructuras criminales: “Ese es el resultado de un Gobierno que es flexible con las bandas criminales. En dos años han venido aumentando el número de miembros, consolidando su presencia territorial”, dijo.
El Senador afirmó que más de un tercio de los municipios del país están bajo control de estas estructuras. Sobre el ELN, señaló: “El ELN particularmente en Arauca se ha venido fortaleciendo, incluso estuvo durante varios meses cerrando unos campos petroleros”.
Uribe instó a implementar una política de seguridad más robusta: “Colombia necesita una política seria de seguridad. Sin seguridad no hay paz, y el único camino para conseguir la paz es la seguridad”.
El legislador concluyó: “Es evidente que Gustavo Petro renunció a cuidar a los colombianos y este atentado es una muestra más”.