Desde este miércoles los atacantes con ácido se enfrentarán a penas superiores a los 20 años de cárcel sin beneficios judiciales o administrativos, esto luego de que fuera sancionada por el presidente Juan Manuel Santos la nueva Ley para este tipo de agresiones.
La ley sancionada tipifica como delito autónomo (deja de ser considerado como una lesión personal) los ataques con ácido o sustancias similares y sube las penas de 150 meses (12 años y 5 meses) a 240 meses (20 años) si la conducta es simple.
De igual manera, según lo sancionado por el mandatario, para los casos donde los ataques causan deformidad o daño permamente en la víctima, como el caso conocido a nivel nacional de Natalia Ponce de León, las penas pasan de 251 meses (20 años y 9 meses) a 360 meses (30 años).
Como un agravante, la Ley indica que se aumentará la pena hasta en una tercera parte si la conducta conlleva deformación del rostro.
Para Elmer Montaña, abogado y exfiscal, la nueva Ley es muy acertada porque el hecho de atacar con ácido a otra persona es “supremamente grave porque le arruina la vida familiar y personal. Las sanciones son proporcionales al daño ocasionado”.
La ley fija un plazo de seis meses para que el Gobierno Nacional cree una política pública integral a las víctimas de ataques con ácido y otras sustancias químicas, garantizando el acceso a la atención médica y sicológica integral.