El Gobierno ha pedido a la Contraloría una auditoría exhaustiva a la EPS Sanitas para evaluar sus indicadores financieros, destacando incumplimientos al mes de junio de 2023, especialmente en el patrimonio y régimen de inversiones, limitándose a cumplir solo con el capital mínimo, según el superintendente nacional de salud, Ulahy Beltrán.
En medio de esta situación, la Superintendencia de Salud de Colombia instó a Sanitas, parte del grupo español Keralty, a garantizar el suministro de medicamentos a sus afiliados y presentar un plan de contingencia. Esto surge tras la declaración de la cadena de farmacias Cruz Verde, que no puede proporcionar fármacos debido a la falta de pagos.
El ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, expresó su desconcierto ante la expansión del conglomerado de Sanitas mientras declara pérdidas, abogando por levantar el velo corporativo. Destacó la importancia de evitar casos como los de Medimás y Saludcoop, subrayando la necesidad de responsabilidad en el sistema de salud.
Jaramillo reiteró la solicitud de información a la Contraloría sobre los recursos de Sanitas y la destinación de utilidades, enfatizando la necesidad de transparencia. Respecto a la deuda que Sanitas demanda al Gobierno, el ministro señaló que están gestionando un crédito público de 90.000 millones de pesos, defendiendo que la deuda es mínima en comparación con las demandas de la EPS.
Ante la pregunta sobre una posible reforma tributaria para abordar la crisis financiera de las EPS, Jaramillo no descartó la opción, destacando el enorme aumento del presupuesto nacional necesario para sostener el sistema de salud y respaldar a los trabajadores cotizantes en el contexto actual.