En un debate de control en la Comisión Sexta del Senado, el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, lanzó duras críticas contra el presidente de Fiduprevisora, Mauricio Marín, debido a problemas en la implementación del nuevo sistema de salud para los maestros. Jaramillo insistió en que la voz de los docentes debe ser prioritaria en este proceso y no las decisiones unilaterales de Marín.
Desde el 1 de mayo, el Fondo del Magisterio (Fomag) debía estar operando bajo un nuevo sistema, sin embargo, la transición no ha sido efectiva en todo el país. “Esto no fue lo que Salud prometió, esto no fue lo que nosotros le vendimos a los maestros. Esto no fue lo que ellos aceptaron. Entonces, ¿la participación dónde está? A los maestros no se les escucha”, declaró Jaramillo.
El ministro acusó a Fiduprevisora de ignorar las quejas de los docentes y de no proporcionar información veraz sobre el proceso de cambio. También criticó que los nuevos prestadores contratados son, en su mayoría, los mismos que operaban en el antiguo modelo. “La gran mayoría de quienes se están contratando tienen que ver con las anteriores contratistas. Hemos dado vueltas y vueltas para terminar en lo mismo. La arquitectura, que fue lo que nosotros presentamos, no se está respetando”, afirmó Jaramillo.
En su intervención, el ministro subrayó que el Fomag pertenece a los maestros y que las decisiones deben estar en sus manos, no en las de Marín. “Aquí le toca al Magisterio insistir y saber que Fomag es de ellos. No es el presidente de la fiduciaria el que manda en ese modelo, sino los maestros, y se tiene que hacer lo que los maestros digan, no lo que se le ocurra al doctor Mauricio Marín, por muy prestigioso o por muy respaldado políticamente que crea estar porque aquí el único que manda es el presidente de la República y esto no puede seguir así”, sentenció Jaramillo.
El Fomag cuenta con 820,835 afiliados, incluyendo maestros y sus familias, quienes están a la espera de una solución eficaz que garantice su acceso a servicios de salud adecuados. La tensión entre el Ministerio de Salud y Fiduprevisora destaca la necesidad de una gestión colaborativa y transparente en la implementación del nuevo sistema de salud para los docentes.