El Gobierno se prepara para radicar un nuevo proyecto de ley que busca prohibir definitivamente el fracking en el país. La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, anunció esta iniciativa que se perfila como un hito en la política ambiental y energética nacional.
Aunque la fecha exacta de radicación aún no se ha confirmado, Muhamad adelantó que el Gobierno está trabajando estratégicamente para generar el “ambiente político” necesario en las comisiones quintas del Senado y la Cámara. Este enfoque cauteloso responde al desafío que representa la oposición al gobierno Petro en estas instancias legislativas clave.
La ministra no descartó la posibilidad de que el proyecto llegue al Congreso con mensaje de urgencia, lo que aceleraría su trámite y podría dar inicio a un periodo de transición energética más rápido. “Esperamos que esta vez sí podamos decir definitivamente que vamos a fortalecer la transición energética”, afirmó Muhamad, subrayando la importancia de invertir en innovación para reducir la dependencia del gas.
El Gobierno no solo busca el apoyo político, sino que también planea un proceso de concertación con organizaciones sociales, ampliando así la base de respaldo para esta controversial medida. Esta estrategia multifacética refleja la determinación del ejecutivo por superar los obstáculos que hundieron una iniciativa similar en la legislatura anterior.