En las próximas dos semanas, el Gobierno Nacional anunciará un incremento en el precio del diésel para los grandes consumidores, como parte de su estrategia para cerrar la brecha en el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), que se proyecta en $12 billones para los años 2024 y 2025.
Así lo confirmó el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, durante su intervención en la Convención de Asobancaria 2024. “La primera medida frente al diésel debe salir antes de 15 días y es incrementar el precio para los grandes consumidores de diésel, que son empresas organizadas que tienen una cadena logística completamente diferente, que no van a las bombas de gasolina, que se tanquean de otra manera”, precisó el funcionario.
El ministro explicó que el congelamiento en los precios de los combustibles, que data desde enero de 2020, ha generado un abultado déficit en el FEPC. Según cifras reveladas por Bonilla, sólo el diésel representó un hueco fiscal de $20 billones en 2022 y $15 billones en 2023.
Entre los principales consumidores de diésel que se verán impactados por la medida se encuentran los sectores petrolero, carbonero, minero y el de transporte de carga. “Estamos mirando cómo subimos [el precio]. No puede subir de la misma manera que la gasolina, porque finalmente todo el transporte de carga tiene un proceso de negociación de las tarifas de los fletes una o dos veces al año”, aclaró Bonilla.
El jefe de la cartera de Hacienda enfatizó que el ajuste en el precio del diésel es necesario para garantizar la sostenibilidad fiscal del país, teniendo en cuenta que la deuda generada por el FEPC no se contabiliza dentro de los indicadores de deuda pública. “Esa es una deuda que no aparece dentro de deuda, no está en los indicadores, pero hay que cubrirla”, puntualizó.
