El próximo 14 de julio es la audiencia en la cual el exjefe de la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía, Luis Gustavo Moreno Rivero, deberá responder por el delito de concusión. Después de haber recibido sobornos con el fin de manipular y afectar la investigación que se le adelantaba contra el exgobernador de Córdoba, Alejandro Lyons Muskus.
El abogado Francisco Bernate, quien asumió hace poco la defensa de Moreno, aseguró que el exfiscal aceptará los cargos endilgados. El jurista precisó que su cliente reconocerá la responsabilidad en los hechos que son materia de investigación, renunciando al juicio y sometiéndose así a una rebaja en la condena. “La pena estaría entre los cinco o seis años de prisión”, precisó el abogado.
De igual manera, Moreno buscará adelantar una negociación para firmar un principio de oportunidad con las autoridades en Colombia y Estados Unidos. Esto consiste en entregar información que ayude a ampliar la investigación a cambio de beneficios judiciales, entre ellos la cesación de la persecución penal por un año.
El exjefe de la unidad anticorrupción es requerido por la Corte Federal para el Distrito Sur de la Florida en Miami (Estados Unidos) por el delito de conspiración para lavar activos con el fin de promover el soborno y la corrupción en Colombia.
En los próximos días la petición llegará a la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia que deberá determinar si da concepto positivo o negativo. La defensa de Moreno solicitará formalmente que se priorice el caso y se resuelva en el menor tiempo posible la petición.