La Defensoría del Pueblo emitió una alerta preocupante sobre el alarmante incremento del reclutamiento de niños, niñas y adolescentes por parte de grupos armados en Colombia. Según datos revelados por la entidad, el 75% de los casos registrados corresponden a menores de edad pertenecientes a comunidades indígenas, lo que representa una situación crítica.
El Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, expresó su inquietud ante esta situación y resaltó la necesidad de una atención diferencial para abordar este flagelo. Señaló la importancia de la colaboración entre las autoridades administrativas y las autoridades étnicas para fortalecer las estrategias de prevención y protección.
La Defensoría reportó 166 casos documentados, pero existe una preocupación latente de que esta cifra sea considerablemente mayor, dado que muchas familias de las víctimas no denuncian por temor a represalias por parte de los grupos armados. La influencia territorial y social ejercida por estos actores dificulta aún más que las comunidades, líderes sociales y familias afectadas se atrevan a presentar denuncias.
El informe revela que el 59.6% de los casos registrados corresponden a niños y adolescentes, mientras que el 40.3% son niñas y adolescentes, evidenciando una afectación diferenciada por cuestiones de género.
Cauca lidera la lista como el departamento con mayor número de casos (124), seguido por Nariño (9), Arauca y Putumayo (6 cada uno) y Caquetá (5). Además, se advierte que las zonas fronterizas y con alto flujo migratorio también están siendo afectadas por este fenómeno.
En cuanto a los grupos armados, las disidencias de las Farc concentran el 91.1% de los casos, seguidas por el ELN (7%), otro grupo minoritario (1.3%) y los grupos posdesmovilización como AGC – Clan del Golfo y Bloque Virgilio Peralta Arenas (0.6%).