Docentes agremiados en Fecode se declararon en desobediencia civil

Los maestros pertenecientes al sindicato calificaron la decisión del Gobierno como “caprichosa, obcecada e irresponsable”.
4 años atrás
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Redacción. Los docentes de la Federación Colombiana de Educadores, Fecode, aseguraron que no asistirán a las clases con alternancias como acto de desobediencia civil.

Según los maestros el Gobierno Nacional no brinda garantías para el cuidado y protección de la salud, como tampoco, para el desarrollo de esta modalidad en las instituciones educativas donde se convocó la presencialidad.

Por el momento, los docentes advirtieron que seguirán impartiendo sus clases desde sus hogares, mediante la modalidad virtual. Asimismo, señalaron que el sindicato se encuentra dispuesto al diálogo, pero “si el ministerio de Educación continúa imponiendo sus medidas de corte dictatorial”, se adelantarán diferentes movilizaciones y convocarán al Paro Nacional del Magisterio.

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Es de recordar que las clases presenciales, bajo la modalidad de alternancia, empezarían en agosto por orden del Gobierno. Es por ello que el sindicato advirtió que elaborarán un documento en el que se expongan “las responsabilidades legales, administrativas, jurídicas penales, civiles y disciplinarias en las que se puede incurrir por no garantizar el derecho a la vida como bien supremo”.

El grupo de educadores anunció que el próximo 3 de agosto, se llevarán a cabo manifestaciones a través de medios digitales, del mismo modo, están convocando a un cacerolazo nacional con el fin de exigir al Gobierno las garantías suficientes para desarrollar las clases de manera presencial.

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“Se suspenderá el trabajo académico pedagógico en todo el país, en su lugar los docentes adelantarán acciones de difusión sobre el significado de la desobediencia civil, la inconveniencia de la presencialidad en la medida de la alternancia, riegos y afectaciones y la defensa de la vida como bien supremo”, señaló el sindicato.

Los maestros pertenecientes al sindicato calificaron la decisión del Gobierno como “caprichosa, obcecada e irresponsable”.