El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, planteó la necesidad de revisar la viabilidad de algunas vigencias futuras comprometidas para obras de infraestructura, con el fin de redirigir esos fondos a proyectos prioritarios que tengan mayor impacto en el empleo y el Producto Interno Bruto (PIB).
En un seminario de Anif y Fedesarrollo, Bonilla señaló que “es hora de evaluar hasta qué punto podemos ajustar ciertos elementos de las vigencias futuras ya comprometidas”.
La propuesta apunta a renegociar contratos de obras estancadas o con escasos avances, para liberar recursos y destinarlos a construcciones estratégicas. “¿De dónde sacaremos fondos para atender puntos críticos si el dinero está en proyectos que no avanzan?”, planteó.
El ministro aclaró que esto implicaría revisar y posiblemente renegociar algunos contratos, pero no se trata de modificar compromisos de manera arbitraria.
Recientemente, Petro habría manifestado interés en tener mayor conocimiento sobre estas obras, sugiriendo que el Gobierno buscaría optimizar recursos para impulsar infraestructura prioritaria.
Según Bonilla, la meta es enfocar los recursos en obras específicas y urgentes. El proceso permitiría desbloquear fondos de proyectos inconclusos y redirigirlos a donde más se necesiten, dinamizando la economía.
La revisión de vigencias futuras podría facilitar la conclusión de obras claves, al reasignar partidas presupuestales ya comprometidas pero con escaso avance. El Gobierno insiste en que no se trata de incumplir contratos, sino de renegociar en beneficio de las prioridades.