Colombia se mantiene como el epicentro mundial de la producción y tráfico de cocaína, liderando simultáneamente la lucha contra este flagelo con cifras récord de incautaciones. En 2023, el país suramericano confiscó 739,5 toneladas de cocaína, consolidándose como el principal bastión en la guerra contra el narcotráfico en América Latina y el Caribe.
La reciente Operación Orión, una iniciativa multinacional liderada por la Armada Nacional de Colombia, ha marcado un hito en la historia de la lucha antidrogas. Durante 45 días de operaciones intensivas, que involucraron a 62 países y 125 instituciones, se logró la incautación de 196 toneladas de cocaína, 164 toneladas de marihuana, 41 toneladas de hachís, y cerca de dos toneladas de base de coca, entre otras sustancias ilícitas.
Estas acciones han asestado un golpe económico significativo a las redes criminales, impidiéndoles recibir más de 18,7 billones de dólares. Además, se destruyeron 302 infraestructuras ilegales y se interceptaron numerosas embarcaciones, vehículos y aeronaves utilizadas por el crimen organizado.
El éxito de Colombia en incautaciones contrasta con su posición como mayor productor mundial de cocaína, reflejando la complejidad del desafío que enfrenta el país. Otros países de la región también han intensificado sus esfuerzos: Ecuador incautó más de 195 toneladas, seguido por Panamá con 95,7 y Brasil con 72,3 toneladas.
La Operación Orión no solo se enfocó en la cocaína, sino que abordó una gama más amplia de actividades ilícitas, incluyendo el contrabando, el lavado de activos y el tráfico de migrantes y armas. Un logro destacado fue la consolidación de la Red Judicial Internacional Orión, que busca fortalecer la cooperación internacional en la persecución legal de los criminales detrás de estas redes.