La Comisión Primera de la Cámara de Representantes aprobó en primer debate, con 17 votos a favor y 6 en contra, un proyecto de ley que busca simplificar el proceso de renovación del porte de armas para quienes ya cuentan con esta autorización.
La iniciativa, que deberá superar tres debates más para convertirse en ley, establece cambios en los procedimientos de actualización de permisos vigentes, mientras mantiene sin modificaciones los requisitos y trámites para quienes solicitan autorización por primera vez.
Durante el debate parlamentario se presentaron posiciones encontradas. Los defensores del proyecto argumentan que busca reducir la burocracia para ciudadanos que ya han cumplido previamente con los requisitos establecidos y han demostrado un uso responsable de las armas.
Por su parte, representantes del Pacto Histórico manifestaron su oposición, recordando que “armarse no es un derecho fundamental” y que cualquier modificación en esta materia debería alinearse con los pronunciamientos previos de la Corte Constitucional sobre las restricciones al porte de armas.
El proyecto continuará su trámite en la plenaria de la Cámara de Representantes, donde se anticipa un debate más amplio sobre los alcances y posibles consecuencias de esta flexibilización en los procedimientos de renovación.
