La fiscal Luz Adriana Camargo ha ordenado disolver el Grupo de Tareas Especiales que estaba investigando a Nicolás Petro, hijo del presidente Gustavo Petro, tras la recusación del fiscal Mario Burgos.
Esta decisión genera un cambio significativo en la investigación de los cargos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito que enfrenta Nicolás Petro.
Con la salida de Burgos, los casos serán redistribuidos a la Dirección de Finanzas Criminales, que designará un nuevo fiscal para continuar con los procedimientos.
La medida ha sido criticada por algunos como una forma de favorecer al hijo del presidente, mientras que la Fiscalía asegura que la reestructuración busca garantizar la imparcialidad y continuidad de las investigaciones.