Redacción. El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, Unicef, afirmó que las fuertes lluvias que se han presentado en Somalia en las últimas semanas, podrían incrementar el riesgo de aparición de un nuevo caso de hambruna en esa nación.
Según los cálculos de la organización, se estima que cerca de 1,25 millones de niños somalís, pueden sufrir malnutrición aguda en lo corrido de este año. Todos ellos habitan en medio de condiciones insalubres, lo cual facilita la propagación de las enfermedades.
Christophe Boulierac, portavoz de Unicef, señaló que en algunas zonas del país, las lluvias intensifican los riesgos a los que se enfrentan los niños, principalmente, aquellos en estado de malnutrición y desplazados.
De acuerdo con lo comunicado por Unicef, las inundaciones recientes dañaron infraestructuras, instalaciones de saneamiento y obligaron a cerrar 22 centros de nutrición que tratan más de 6.000 niños con malnutrición.