Hezbollah ejecutó uno de sus mayores ataques contra el norte de Israel, lanzando aproximadamente 165 proyectiles y drones, que dejaron un saldo de siete personas heridas, según confirmó el servicio de emergencias israelí Magen David Adom (MDA).
El ataque se desarrolló en dos oleadas principales. La primera, dirigida hacia Carmiel, resultó en tres heridos: una mujer de 27 años en estado moderado, un hombre de 35 años y una bebé de un año con heridas leves, todos impactados por fragmentos de proyectiles interceptados en la localidad árabe de Bina.
La segunda oleada, que consistió en al menos 90 proyectiles lanzados en menos de una hora hacia la zona de Haifa, dejó otros tres heridos: un hombre de 52 años en estado moderado, un joven de 17 años con heridas en el brazo y un hombre de 55 años lesionado al buscar refugio.
Hezbollah aseguró haber atacado una base de entrenamiento de paracaidistas en Carmiel. El Ejército israelí también reportó la interceptación de un dron cerca del kibutz de Malkia, en la frontera.
Este incidente se suma a más de un año de conflicto que ha dejado 3.100 víctimas en Líbano y 73 del lado israelí, incluyendo 43 civiles. Israel mantiene una ofensiva terrestre en el sur del Líbano desde el 1 de octubre.