Prensa latina|El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, afirmó hoy que su país responderá en similar proporción a la retención ilegítima de los activos en el extranjero, acto contradictorio a las normas internacionales.
Aseguró Lavrov en comentarios sobre la reciente congelación de las cuentas de la embajada rusa en Bélgica que Rusia logrará la derogación de esa medida, pero prometió una respuesta simétrica de Moscú.
El canciller dijo a la prensa durante las actividades del Foro Económico de San Petersburgo que esa acción contraviene la Convención de Viena que norma las relaciones diplomáticas entre los Estados.
La respuesta recíproca será inevitable y estamos procurando que sea derogado el arresto de las cuentas de nuestras instituciones diplomáticas, enfatizó el ministro.
Dijo Lavrov que no satisface la explicación ofrecida por la cancillería de Bélgica de que no estaba al corriente de los hechos, por cuanto en el país “rige un sistema judicial independiente”.
El ministerio ruso de Asuntos Exteriores transmitió la víspera al embajador belga que los hechos constituían un abierto acto inamistoso en relación con Rusia y una flagrante violación de todas las normas del derecho internacional.
Al respecto, recordó Lavrov que la Convención de Viena salvaguarda la inmunidad de la propiedad diplomática y todo con ello relacionado.
No aceptamos explicación alguna por cuanto las garantías de inmunidad al patrimonio diplomático las proporciona el Estado, aseveró el canciller ruso.
La cancillería exigió asimismo una restitución de los derechos soberanos de la parte rusa quebrantados en Bélgica y la garantía del normal funcionamiento de las instituciones diplomáticas y de su personal.
Según la prensa, la congelación de activos y cuentas pertenecientes a Rusia en ese país europeo tiene que ver con una demanda de los exaccionistas de la desaparecida compañía petrolera Yukos, intervenida por el Gobierno en 2004, tras declararse en quiebra.
El ministro de Desarrollo Económico Alexéi Uliukaev comunicó que Moscú apelaría el fallo de la corte de arbitraje de La Haya y catalogó el arresto de ilegal.
Yukos enfrentó un proceso judicial en 2003 bajo la acusación de crear un esquema de evasión de impuestos a través de sus filiales regionales. La corte europea de Estrasburgo obligó a Rusia a compensar a los antiguos accionistas con mil 0 86 millones de euros.
