Reuters | Equipos de rescate buscaban el martes a más de 400 personas, muchas turistas chinos de edad avanzada, que están desaparecidas después de que un crucero sufrió los embates de un tornado y se hundió en el río Yangtsé, en lo que puede convertirse en el peor desastre marítimo en China en casi 70 años.
Buzos y otros socorristas rescataron a cinco personas que se encontraban atrapadas en el casco boca arriba del Eastern Star de cuatro cubiertas, una pequeña fracción de las 458 personas que según los medios estatales estaban a bordo cuando el barco se hundió la noche del lunes.
Las operaciones de rescate se extendían hasta altas horas de la noche del martes con vehículos paramilitares, decenas de policías y soldados, así como autos médicos y equipos meteorológicos que rodean el sitio.
Los soldados levantaban barricadas periódicas a lo largo de un camino fangoso, permitiendo sólo el paso de los vehículos oficiales a la zona en la provincia central de Hubei.
En el principal hospital del condado de Jianli, policías custodiaban la puerta de una habitación donde estaban siendo tratados los sobrevivientes y bloquearon el paso de los reporteros que intentaron entrar.
Tres sobrevivientes fueron colocados en la sala general, mientras que el resto estaban en cuidados intensivos, según una enfermera.
Angustiado familiares de algunos de los pasajeros se enfrentaron con funcionarios en la ciudad de Shanghái, donde muchas de las personas a bordo habían reservado sus viajes, enojados sobre lo que dijeron era falta de información.
Decenas de botes de rescate lucharon contra el viento y la lluvia que envuelve la parte sur del río más largo de Asia para llegar a la nave, que yacía boca abajo en el agua a unos 15 metros de profundidad.